No hace mucho leí una investigación acerca del poder del compromiso. En ella describen un estudio en el que un grupo de mujeres aceptaron realizarse una autoexploración mamaria.
Las dividieron en grupos A y grupo B. Al grupo A sólo les dijeron que lo hicieran en algún momento dentro de los siguientes 30 días. Al grupo B les pidieron que indicaran cuándo y dónde lo iban a realizar.
Resulta que sólo el 53% del grupo A llevó a cabo la autoexploración, mientras que las participantes del grupo B, las que indicaron cuándo y dónde lo llevarían a cabo, el 100 por ciento lo llevó a cabo.
Ahora te pregunto, cuando te fijas metas u objetivos, ¿lo haces tan especifico cómo indicar cuándo y dónde llevaras a cabo dicha actividad? Quizá ahí esté la diferencia entre alcanzar lo que nos proponemos y lo que no. ¿O tú que crees?